La impermeabilización de cubiertas planas es una tarea fundamental para proteger los edificios, sobre todo aquellos situados en zonas de alta humedad. La exposición constante a la lluvia y a la condensación suele provocar filtraciones, deterioro estructural y costes de reparación elevados.
Por esta razón, debes elegir un sistema adecuado que garantice una mayor durabilidad y la máxima eficiencia energética y confort interior. En este artículo, conoceremos los métodos más eficaces para impermeabilizar las cubiertas planas en climas húmedos.
Características de las cubiertas planas frente a otros tipos
Las cubiertas planas se diferencian de otros tipos por su diseño horizontal o con muy poca pendiente. Esta característica permite que las podamos ver, fundamentalmente, en terrazas, azoteas o zonas técnicas. Desde el punto de vista estético, son modernas y permiten una mejor distribución de las instalaciones.
No obstante, requieren de una impermeabilización más cuidadosa, ya que evacúan el agua más lentamente que las cubiertas inclinadas.
Por qué son más vulnerables a filtraciones
Precisamente, esta escasa pendiente es la que provoca que las cubiertas planas presenten más problemas de filtraciones, ya que se dificulta el drenaje rápido del agua de lluvia. Con el paso del tiempo, el agua se acumula y puede deteriorar los materiales si no se cuenta con una impermeabilización eficaz.
Además, las juntas y otros elementos instalados en la superficie son puntos críticos por los que el agua puede infiltrarse si no se sellan correctamente o se daña la membrana impermeable.
Sistemas de impermeabilización eficaces para reparar humedades en cubiertas planas
Veamos, a continuación, cuáles son los mejores sistemas de impermeabilización de cubiertas planas para tu edificio.
Soluciones aplicadas habitualmente en entornos con alta pluviometría
Las soluciones más recomendadas en estos casos son las siguientes:
- Membranas bituminosas.
- Láminas sintéticas (PVC, EPDM).
- Sistemas de poliuretano líquido.
Estos materiales ofrecen una alta resistencia al agua, flexibilidad y durabilidad. No obstante, también se suelen aplicar imprimaciones y selladores específicos en puntos críticos. La correcta preparación de la superficie y una aplicación profesional son claves para asegurar una protección más duradera frente a las filtraciones y otros tipos de humedad.
Errores comunes en reparaciones anteriores que provocan filtraciones
La elección de los materiales inadecuados, la aplicación sobre superficies sucias o mal preparadas y el sellado deficiente de las juntas son los errores más habituales que se producen en estos casos.
Asimismo, también es común no respetar los tiempos de secado o aplicar capas demasiado delgadas. Estos fallos van a afectar a la eficacia del sistema y provocarán la aparición de filtraciones que dañan la estructura.
Intervención profesional: cuándo y por qué es necesaria
Si existen filtraciones recurrentes, daños estructurales o los materiales están deteriorados, es imprescindible la presencia profesional en la impermeabilización de cubiertas planas.
Qué hacemos en una reparación de cubierta con filtraciones activas
La tarea se inicia con la localización del origen del problema mediante una inspección detallada. A continuación, se retiran los materiales dañados, se prepara la superficie y se aplica un sistema de impermeabilización adecuado (membranas líquidas, láminas sintéticas, etc.).
Por último, se refuerzan las juntas para evitar futuras filtraciones y se realizan pruebas de estanqueidad para garantizar que la cubierta ha quedado totalmente sellada y protegida.
Cómo garantizamos la estanqueidad en proyectos de rehabilitación
Lo más importante para asegurar la estanqueidad es trabajar con materiales impermeables que sean de alta calidad. A partir de aquí, se requiere una preparación meticulosa del soporte, la aplicación de sistemas de impermeabilización continuos y el refuerzo en los puntos más vulnerables.
Para terminar, se llevan a cabo diversas pruebas de estanqueidad para verificar la total eficacia del sistema.